Tos

Tos húmeda en un niño: características y características del tratamiento.

El diagnóstico oportuno y correcto, así como la terapia adecuada, ayudarán a curar la tos húmeda en un niño.

Etiología y patogenia

La tos es uno de los síntomas más comunes que se observan en los niños. Esta es una reacción de defensa compleja del cuerpo, cuyo objetivo es eliminar las secreciones bronquiales, partículas extrañas, microorganismos de los pulmones y los bronquios. Gracias a la tos, se restaura la permeabilidad del sistema respiratorio.

Una tos húmeda se llama tos productiva. Dicho broncoespasmo se acompaña de la formación de secreciones bronquiales, seguida de su excreción.

Muy a menudo, un síntoma desagradable ocurre en la estación fría, el verano y la primavera son un período bastante favorable. La aparición de tos húmeda (sin síntomas de gripe o ARVI) en el verano se asocia con el efecto de un alérgeno en el cuerpo durante la floración de algunas plantas. Un papel importante en esto lo juega una predisposición hereditaria.

La exposición al alérgeno provoca hinchazón de la membrana mucosa del tracto respiratorio, lo que dificulta la liberación de secreciones. Se acumula mucho moco en los bronquios y se produce tos. La eliminación del alérgeno le permite deshacerse de la tos sin el uso de mucolíticos y agentes antibacterianos.

¡Importante! La tos es la reacción defensiva del cuerpo. Su aparición es la primera señal para los padres sobre la presencia de un proceso patológico en el cuerpo del niño.

Las causas comunes de tos húmeda son infecciones respiratorias agudas con localización del proceso inflamatorio en las secciones inferior (laringe, tráquea, bronquios y pulmones) y superior (nasofaringe, orofaringe).

Causas de la tos húmeda:

  • bronquitis aguda y crónica;
  • neumonía;
  • asma bronquial;
  • cuerpo extraño en el tracto respiratorio;
  • bronquiectasias;
  • absceso pulmonar;
  • tuberculosis;
  • alergia.

Una tos húmeda es el primer signo de enfermedades del sistema respiratorio causadas por microflora patógena. Se acompaña de un aumento en la formación de moco bronquial. La acumulación de secreciones viscosas en la luz de los bronquios provoca la adición de microflora bacteriana y complicación del proceso inflamatorio. Hay una hinchazón de la membrana mucosa y la actividad motora del epitelio ciliado disminuye, lo que complica la eliminación de las secreciones de la luz de los bronquios. Con la acumulación de esputo, se crea un entorno favorable para la reproducción y el desarrollo de la microflora patógena, que es imposible con una tos productiva.

En niños de 2 a 4 meses, el reflejo de la tos es muy débil, lo que agrava el curso de la enfermedad, acompañado de la formación de esputo. La situación ha ido mejorando desde hace seis meses.

El inicio del broncoespasmo suele ir precedido de rinitis y amigdalitis. El moco secretado irrita la membrana mucosa del tracto respiratorio superior cuando fluye por la faringe, lo que provoca un reflejo de tos. Se nota un ataque fuerte por la mañana y por la noche, especialmente con un cambio en la posición del cuerpo.

La aparición de tos es promovida por:

  • hipotermia;
  • disminución del estado inmunológico;
  • factores de estrés (asistencia a instituciones educativas preescolares y escolares);
  • contacto con niños enfermos en el equipo de niños;
  • comunicación con familiares enfermos;
  • desnutrición;
  • violación del microclima en la habitación;
  • falta de paseos al aire libre.

El curso y la resolución del proceso inflamatorio depende de las características de las secreciones bronquiales: viscosidad, elasticidad y fluidez o adhesividad (la capacidad del moco para separarse durante un empujón de tos).

Síntomas

La tos no es una enfermedad, sino un síntoma de un proceso patológico (enfermedad subyacente) en el cuerpo de un niño.

La tos con esputo en un niño es un síntoma característico de la bronquitis aguda, bronquitis crónica obstructiva. La bronquiectasia siempre va acompañada de tos. Con neumonía, toser es un signo positivo que indica el comienzo de la recuperación.

Signos de tos húmeda:

  • la liberación de esputo viscoso durante la tos;
  • obstrucción bronquial (separación difícil de secreciones con presencia suficiente en la luz, tos frecuente);
  • dificultad para respirar y sibilancias.

La naturaleza del moco secretado indicará la causa de la tos húmeda. El secreto es viscoso y purulento. Criterios de evaluación del esputo: viscosidad, transparencia, color.

  1. Al toser de naturaleza viral, el moco secretado es transparente, con una fluidez típica.
  2. La infección bacteriana produce un moco viscoso de color amarillo verdoso que es difícil de separar.
  3. Con una tos húmeda alérgica, se observa la secreción de esputo en "vidrio", que es difícil de separar por su aparente transparencia.
  4. La secreción de color blanco lechoso es característica de la tos húmeda de origen fúngico.

A la edad de hasta 2-3 meses, pueden ocurrir enfermedades respiratorias con un cuadro clínico borrado con un deterioro repentino de la afección.

Síntomas asociados con tos húmeda que requieren atención médica:

  • Sensación de malestar: letargo, apatía, falta de apetito, palidez.
  • La dificultad para respirar (respiración rápida, acompañada de aumento de la respiración) es un signo de daño en el tracto respiratorio inferior.
  • Un aumento de la temperatura corporal (especialmente con fiebre en desarrollo) a 39 ° C.

¡Importante! Una tos frecuente con fiebre superior a 38 ° C en un niño menor de 3 meses requiere una atención especial.

Curso de la enfermedad

Una tos con esputo en un niño con inflamación aguda indica la resolución del proceso patológico. En el curso crónico de la enfermedad, la aparición de tos húmeda indica una exacerbación del proceso.

Dependiendo de cuánto dure la tos húmeda, el curso de la enfermedad es:

  • agudo (hasta 3 semanas);
  • subagudo (3-8 semanas);
  • crónico (3-8 semanas o más).

La tos en los niños suele estar latente debido a la incapacidad fisiológica relacionada con la edad para expectorar el esputo. Los niños pequeños (2 años o menos) no pueden toser. La secreción de tos a la edad de un niño de 1 a 5 años es más difícil de separar que en los niños mayores. El esputo se caracteriza por una mayor viscosidad y poca adhesividad.

Si el broncoespasmo es causado por hipotermia, entonces la enfermedad, por regla general, tiene un curso agudo y puede pasar sin un tratamiento específico. Un proceso complicado, provocado por una microflora patógena, dura aproximadamente un mes, avanza de forma subaguda o se vuelve crónico.

Tratamiento

En primer lugar, debe elegir fondos que afecten la fuerza, la frecuencia y la naturaleza de la tos. En un proceso productivo, recurren al uso de mucolíticos, expectorantes y antitusivos, que tienen efectos antimicrobianos, antiinflamatorios, anestésicos locales y analgésicos.

La farmacología moderna tiene medicamentos a base de hierbas, cuyo uso adecuado es bastante efectivo como monoterapia. Los ingredientes activos, alcaloides y saponinas de hierbas medicinales, estimulan el trabajo del epitelio bronquial, aumentando moderadamente la secreción de moco.

Casi todas las fitopreparaciones tienen un efecto politerapéutico y están destinadas a licuar y eliminar activamente las secreciones patológicas de los pulmones y los bronquios.

Para el tratamiento de una enfermedad con secreción de moco en cantidades suficientes, el uso de mucolíticos será óptimo. Los jarabes se usan para tratar la tos húmeda en niños de 2 años o más como monoterapia. Quizás su combinación con otros fármacos (antibióticos, antihistamínicos).

¡Importante! Está estrictamente prohibido combinar mucolíticos con fármacos antitusivos.

La secreción escasa requiere el uso de expectorantes. Activan la secreción bronquial y mejoran la capacidad motora del epitelio ciliado.

La acción de los medicamentos antitusivos tiene como objetivo suprimir el reflejo de la tos y reducir la fuerza del empujón de la tos, que está contraindicado en presencia de una gran cantidad de moco en la luz de los bronquios y la tráquea. De lo contrario, habrá una acumulación excesiva de productos inflamatorios en el tracto respiratorio y una agravación del proceso patológico.

¡Importante! Los medicamentos que suprimen el reflejo de la tos son recetados solo por un médico después de examinar al niño y establecer un diagnóstico.

A menudo, la tos húmeda en un niño no requiere un tratamiento especial si el médico no nota cambios en el estado general. Será suficiente el uso de un complejo de vitaminas y minerales e inmunoprotectores. Se recomienda darle a su hijo más bebidas calientes.

Ayuda a eliminar el síndrome de la tos:

  1. Ventilación frecuente y regular de la habitación.
  2. No fumar tabaco en presencia de un niño.
  3. Aumento de la humedad en la habitación.
  4. Masaje de pecho (método de vibración).
  5. Uso del juego "soplar un globo" para niños mayores. Una respiración profunda provoca una expansión forzada refleja de las vías respiratorias y la aparición de un reflejo de tos. Se produce una ventilación activa de los pulmones.
  • Acostar boca abajo a un bebé de un año (gimnasia de recuperación). El ejercicio promueve la tos debido a la irritación de la membrana mucosa por el esputo que fluye por la pared de la nasofaringe.
  • Tos estimulante en lactantes con cuchara. La raíz de la lengua se irrita, lo que contribuye al reflejo de tos emético. La manipulación requiere ciertas habilidades que le permitan detener el procedimiento a tiempo, sin causar vómitos, pero solo provocar tos. Puede estimular la tos solo antes de la alimentación o media hora después.

¡Importante! El autotratamiento de la tos sin consulta previa con un pediatra, especialmente en niños menores de 2 años, conduce a una complicación del proceso inflamatorio.