Dolencias de garganta

Cómo tratar la inflamación de la amígdala lingual.

El agrandamiento de las amígdalas orofaríngeas indica la presencia de un foco crónico de infección o frecuentes ataques de microbios. El anillo protector está formado por las amígdalas, que están compuestas por tejido linfoide. Todos los días, luchan contra millones de patógenos que intentan ingresar al cuerpo.

La hipertrofia de la amígdala lingual se produce por la necesidad de mantener constantemente las defensas del organismo.

Normalmente, las amígdalas pueden aumentar en la fase aguda de una enfermedad infecciosa, sin embargo, después de derrotar a los microbios, el tejido linfoide recupera su tamaño anterior.

Las amígdalas linguales se hipertrofian en paralelo con otras formaciones linfoides, ya que están en contacto directo y realizan una función protectora.

Causas de la hipertrofia

Los cambios en la estructura de la amígdala pueden ocurrir de varias formas:

  • vascular-glandular, que se observa en el caso de cambios locales en forma de proliferación y plétora de vasos sanguíneos, mientras que el volumen de tejido disminuye;
  • linfoide, cuando se produce hiperplasia linfoide debido a una inflamación prolongada y la presencia de intoxicación infecciosa.

Un aumento en la formación de linfoides ocurre por las siguientes razones:

  1. inflamación crónica de las amígdalas (faríngea o palatina): con adenoides y amigdalitis, cuando los microbios permanecen en los pliegues de la membrana mucosa y apoyan la inflamación;
  2. inflamación de la amígdala lingual (glositis) cuando se lesiona;
  3. herencia agobiada. Si a los padres se les extirparon las adenoides o las amígdalas, el niño también puede tener problemas con las amígdalas;
  4. efecto negativo del aire seco y polvoriento, peligros industriales;
  5. de fumar;
  6. enfermedades oncológicas de la faringe;
  7. se sometió a una cirugía para extirpar adenoides o amígdalas, cuando las amígdalas restantes asumen la función de las formaciones linfoides extirpadas, lo que conduce a su hiperplasia;
  8. daño profesional cuando el aparato de formación de voz tiene una carga pesada (cantantes, oradores, locutores).

En los niños, la patología es extremadamente rara, pero para los hombres y mujeres maduros en el período premenopáusico, la hipertrofia de la amígdala lingual no es infrecuente. La mayoría de los casos ocurren durante la pubertad.

Manifestaciones de la enfermedad

Es posible sospechar la proliferación de tejido linfoide en la región de la lengua sobre la base de los siguientes signos clínicos:

  1. malestar al tragar;
  2. la presencia de un elemento extraño;
  3. un ataque repentino de tos seca;
  4. ligera hiperemia de la garganta;
  5. ronquera de voz;
  6. nasalidad
  7. apnea, que está plagada de hipoxia debido al suministro insuficiente de oxígeno a los órganos internos;
  8. ronquidos intensos por la noche;

Si la amígdala está muy agrandada, se puede ver, aunque normalmente no es visible.

La apnea es una complicación grave de la enfermedad que requiere atención médica.

Procedimientos de diagnóstico

Es difícil diagnosticar de forma independiente la hipertrofia de la amígdala lingual, ya que los síntomas son inespecíficos y pueden indicar una patología diferente. Habiendo consultado a un médico, el diagnóstico comienza con una encuesta de las quejas que molestan a una persona y las peculiaridades de su apariencia. A continuación, el médico examina la historia de la vida y descubre con qué estaba enfermo y qué padecía el paciente.

Para examinar la cavidad oral, se realizan faringoscopia y laringoscopia, según el resultado de lo cual es posible establecer el grado de proliferación del tejido linfoide y evaluar la derrota de las glándulas. Además, se examina la lengua, o más bien su raíz, donde se ubica la amígdala.

Para diagnosticar entre una enfermedad infecciosa y una hipertrofia no inflamatoria, se toman muestras de garganta y se examinan mediante microscopía o cultivo.

La hipertrofia de la amígdala lingual debe ser diferente de:

  • un proceso inflamatorio en la zona de la raíz de la lengua, que puede expresarse en forma de absceso, flemón o desarrollarse como resultado de tuberculosis, sífilis o candidiasis. En el examen, se revelan películas con una estructura densa. Por diferencias, se realiza un análisis bacteriológico;
  • las formaciones quísticas de la cavidad bucal se caracterizan por contornos claros, superficie lisa y consistencia tensa;
  • tumores benignos (adenoma): se distinguen por una estructura densa con una superficie lisa;
  • neoplasias malignas, que se pueden distinguir por una superficie tuberosa, densidad pedregosa y compactación de los ganglios linfáticos regionales. Se usa una biopsia para el diagnóstico.

Direcciones de tratamiento

Las tácticas médicas las determina el médico en función de los resultados de los diagnósticos instrumentales y de laboratorio.

La tarea del diagnóstico no es solo confirmar el diagnóstico, sino también identificar la causa de la enfermedad. El tratamiento también tiene como objetivo eliminar la causa y reducir la gravedad de los síntomas clínicos.

Si la causa de la hipertrofia linfoide es una inflamación o infección crónica, es recomendable prescribir:

  • terapia antiinflamatoria de acción local (hacer gárgaras con Givalex, Chlorfillipt, irrigación de las amígdalas - Tantum Verde, Jocks);
  • agentes antibacterianos de acción sistémica o local (Augmentin, Bioparox spray, Miramistin en forma de solución);
  • medicamentos antimicóticos (fluconazol, intraconazol, ketoconazol);
  • antihistamínicos (Suprastin, Claritin, Tavegil).

Los medicamentos antibacterianos se prescriben teniendo en cuenta los resultados del antibioticograma durante el cultivo bacteriano.

El paciente debe tener un poco de paciencia y limitar su dieta a alimentos sólidos, picantes, calientes y encurtidos. Además, debe tomarse un tiempo para relajarse, evitar el estrés, ir a la sauna y reducir la actividad física. No se olvide de aumentar la inmunidad, el endurecimiento, la terapia con vitaminas y caminar al aire libre.

Para ayudar al tratamiento tradicional, puede usar recetas populares. También se pueden utilizar decocciones de hierbas (manzanilla, corteza de roble, caléndula) y aceites esenciales para enjuagar la orofaringe e inhalar.

Si no hay ningún efecto de la terapia conservadora, el médico decide un procedimiento quirúrgico. Rara vez se realiza una cirugía para extirpar una amígdala. En el período postoperatorio, es posible que haya sangrado y una disminución temporal de las defensas inmunitarias. La eliminación se puede realizar mediante coagulación o criocongelación. Los procedimientos se repiten varias veces, al final se puede lograr un buen resultado.

Profilaxis

A pesar de los enfoques modernos de tratamiento, que permiten lograr un efecto positivo, es mejor que el cuerpo no se enferme en absoluto. Para hacer esto, debe seguir recomendaciones simples:

  1. atempere a los niños desde una edad temprana;
  2. tratar las enfermedades crónicas a tiempo;
  3. visite regularmente al dentista, desinfecte los focos de infección en la cavidad bucal;
  4. que tengas un buen descanso;
  5. evite el estrés, la actividad física intensa;
  6. toma vitaminas;
  7. realizar ejercicios matutinos, actividades deportivas.

El niño debe dormir en una habitación limpia y ventilada. No se permite vivir en una habitación con aire seco y polvoriento, especialmente en presencia de moho. Incluso en invierno, se requiere ventilar, ¡pero no un borrador!

Es más fácil fortalecer el sistema inmunológico en unas vacaciones junto al mar. Los rayos del sol, los alimentos saludables y los tratamientos con agua no solo fortalecen el sistema inmunológico, sino que también mejoran el estado de ánimo de los niños y los padres.