Dolencias de garganta

Síntomas y signos de hinchazón de la garganta y laringe.

Las neoplasias malignas en el área de la nasofaringe comienzan a desarrollarse después del inicio de un foco de inflamación y proliferación patológica de células epiteliales en la región de la laringe. El cáncer de garganta se diagnostica con mayor frecuencia en hombres, mientras que el diagnóstico es mucho menos común en mujeres. La probabilidad de una hinchazón en la garganta aumenta significativamente en aquellas personas que fuman, abusan del alcohol, por la naturaleza de sus actividades a menudo se encuentran en habitaciones altamente contaminadas y polvorientas, no siguen las reglas de higiene bucal.

Causas de ocurrencia

Las neoplasias malignas que causan hinchazón de la garganta afectan el revestimiento de la nasofaringe y la laringe. El tumor en sí no es tan peligroso. Un gran peligro para la vida humana es la rápida multiplicación de células patógenas y el daño a los órganos y tejidos cercanos. Además, sin la influencia de factores extraños, el cáncer de garganta se desarrolla muy raramente. Entonces, a menudo la enfermedad está precedida por signos característicos, que indican el desarrollo de un proceso patógeno.

La causa principal del cáncer de garganta puede ser:

  • infecciones inflamatorias de la nasofaringe a largo plazo, frecuentes y no tratadas;
  • quistes de garganta y fibromas;
  • cicatrices como resultado de lesiones en las membranas mucosas de la nasofaringe;
  • papilomas, paquidermia y otras neoplasias benignas.

Las personas con un mayor riesgo de cáncer de garganta incluyen aquellas que:

  • abusa de las bebidas alcohólicas;
  • tiene muchos años de experiencia como fumador;
  • ignora las reglas de higiene bucal;
  • tiene afecciones crónicas de la garganta no tratadas;
  • genéticamente predispuesto al desarrollo de un tumor en la garganta;
  • ha alcanzado la edad de más de sesenta años;
  • trabaja en industrias peligrosas, por ejemplo, en fábricas de pinturas y barnices, en contacto con productos químicos;
  • vive en grandes ciudades industriales;
  • consume una gran cantidad de alimentos demasiado picantes, carnes ahumadas, mientras que excluye las verduras y frutas frescas de la dieta.

Signos de la enfermedad

A menudo, cuando se produce un tumor de laringe, los síntomas son ambiguos y no nos permiten afirmar inequívocamente la presencia de cáncer de garganta. Por lo tanto, los expertos identifican una serie de signos bastante generales, en caso de que se deba consultar a un médico y realizar una serie de procedimientos de diagnóstico para prescribir el tratamiento correcto.

Signos comunes de hinchazón en la garganta:

  • sensaciones dolorosas al tragar comida y saliva, sudoración, ronquera;
  • sensación de presencia de un objeto extraño, opresión en la garganta;
  • deterioro en el trabajo de las papilas gustativas;
  • sueño inquieto, insomnio;
  • trastornos auditivos;
  • falta de apetito y, como resultado, pérdida repentina de peso;
  • fatiga, apatía;
  • en las últimas etapas del desarrollo del tumor, puede aparecer una hinchazón en la garganta;
  • sequedad en la nasofaringe, tos perruna;
  • secreción de esputo mezclado con sangre.

¡Importante! A menudo, los síntomas como la ronquera persistente y la tos seca como ladridos se atribuyen a las consecuencias del tabaquismo, mientras que estos síntomas son las manifestaciones más comunes cuando se produce un tumor de laringe.

Tipos de cánceres de garganta

Para elegir el tratamiento adecuado, es necesario caracterizar las manifestaciones de la enfermedad para determinar el tipo de cáncer que ha surgido en la nasofaringe.

Los tipos más comunes de cáncer de laringe incluyen:

  1. tumor escamoso no queratinizante;
  2. tumor queratinizante de células escamosas;
  3. Tumor de células escamosas altamente diferenciado.

1. Cuando ocurre una enfermedad del primer tipo, los síntomas que caracterizan en este caso un tumor laríngeo se caracterizan por el rápido desarrollo de la enfermedad y la extensa diseminación de metástasis, penetrando profundamente en los tejidos de los órganos vecinos. Este tipo de hinchazón de garganta es el más común. Para un tumor de células escamosas no queratinizante, el desarrollo es característico de la parte superior de la garganta, así como en los tejidos del ventrículo laríngeo. Como resultado del desarrollo de un tumor de este tipo, la luz de la laringe se estrecha, lo que puede causar dificultad para respirar, ronquera y pérdida de la voz.

2. Este tipo de tumor maligno afecta a las células que pueden queratinizarse durante un período de tiempo. A diferencia de un tumor no queratinizante, la queratinización se caracteriza por un desarrollo lento, así como una ausencia casi completa de metástasis.

Un tumor queratinizante ocurre con mayor frecuencia cerca de las cuerdas vocales y la parte inferior de la garganta. Es la segunda variante de localización de neoplasias cancerosas que se considera la más peligrosa para la vida humana, ya que en este caso se observa la rápida propagación de células patógenas. Cabe señalar que el cáncer queratinizante es muy difícil de diagnosticar, por lo que existe el riesgo de que se detecte demasiado tarde y se retrase el inicio del tratamiento.

3. Una característica de un tumor de células escamosas altamente diferenciado en la garganta es que una gran cantidad de células de tejidos sanos participan en su crecimiento y diseminación. Es por eso que la terapia de este tipo de tumor maligno causa las mayores dificultades y lleva bastante tiempo. En este caso, el tumor afecta la región supraplegable de la faringe, donde el crecimiento de células patógenas y su diseminación ocurre lo más rápido posible.

Fases de desarrollo

Cuando se produce una neoplasia maligna, la condición del paciente se deteriora constantemente, la enfermedad progresa, acompañada de un aumento en el tamaño del tumor. Los oncólogos distinguen varias etapas principales en el desarrollo del cáncer:

  1. Etapa cero.
  2. Primera etapa.
  3. Segunda etapa.
  4. Tercera etapa.
  5. Etapa cuatro.

1. El estadio cero de una neoplasia maligna en la nasofaringe se diagnostica en muy raras ocasiones. El caso es que en esta etapa del desarrollo del tumor, los síntomas se expresan mal, por lo que el paciente no les presta suficiente atención al principio.

En la etapa más temprana del desarrollo del tumor, la inflamación afecta un área pequeña de la superficie de la garganta, por lo que una persona no experimenta sensaciones dolorosas y desagradables.

El pronóstico para el tratamiento de un tumor maligno en la etapa inicial del desarrollo de la enfermedad es positivo y asciende aproximadamente al 95-100%.

2. La primera etapa del desarrollo de un tumor de garganta tiene síntomas característicos:

  • sensación de un objeto extraño en la garganta;
  • ardor en la garganta al tragar saliva, comida, al hablar;
  • el tumor aumenta de tamaño y se extiende más allá de la laringe.

A pesar de la rápida progresión de la neoplasia maligna, en la primera etapa del desarrollo del tumor, los tejidos cercanos no se ven afectados y tampoco se observa metástasis. El pronóstico en esta etapa del desarrollo de la enfermedad también es positivo y asciende a más del 75%.

3. Si la enfermedad ha alcanzado la segunda etapa de desarrollo, en esta etapa:

  • un crecimiento canceroso se extiende más allá del área de la garganta y afecta los órganos y tejidos adyacentes;
  • el paciente se siente ronco;
  • Se manifiestan violaciones en el trabajo del aparato de habla.

En la segunda etapa, tampoco se observan metástasis. El pronóstico de supervivencia en este caso es de alrededor del 70%.

4. Diseminación intensiva del tumor fuera de la región de la laringe, germinación de las paredes de la garganta, desviaciones significativas en el trabajo de las cuerdas vocales: estos síntomas indican la transición de la enfermedad a la tercera etapa de desarrollo. Además, el paciente también está preocupado por los siguientes síntomas:

  • malestar en la región faríngea, ya que el tamaño del tumor aumenta rápidamente;
  • ronquera constante;
  • tos seca y molesta;
  • dolor incluso al tragar saliva;
  • sensación constante de un objeto extraño en la garganta;
  • en esta etapa, el paciente puede dejar de hablar por completo.

En el diagnóstico del cáncer de faringe en estadio III, los expertos distinguen dos estadios intermedios más:

  • el estadio 3A se caracteriza por la diseminación de la neoplasia maligna más allá de la garganta, mientras que la metástasis no ocurre;
  • El estadio 3B se caracteriza por la diseminación del tumor a los tejidos adyacentes de la faringe y también se observan varias metástasis cancerosas.

El pronóstico de supervivencia en este caso es aproximadamente del 50%.

5. La última, cuarta etapa del desarrollo de un tumor maligno de garganta se caracteriza por síntomas más pronunciados:

  • perdida de voz;
  • dolor severo al tragar;
  • tos;
  • un aumento significativo en el tamaño del tumor, diseminación a los órganos vecinos, daño a los ganglios linfáticos.

El pronóstico de recuperación en este caso no es alto, alrededor del 25%.

Métodos de diagnóstico

Para prescribir el tratamiento correcto al paciente, es necesario llevar a cabo una serie de procedimientos de diagnóstico. El diagnóstico del cáncer de garganta generalmente incluye los siguientes procedimientos:

  • examen visual de la cavidad oral, garganta, laringe, que puede revelar la presencia de una neoplasia, sin embargo, este método de diagnóstico es efectivo en las últimas etapas de la enfermedad;

En las primeras etapas, los síntomas de un tumor maligno de garganta son idénticos a los de otras enfermedades infecciosas, lo que a menudo complica el diagnóstico y conduce a un tratamiento incorrecto y retrasado.

  • fibrolaringoscopia, laringoscopia: exámenes de la superficie de la laringe, realizados con un dispositivo especial, un endoscopio, mientras que el médico también tiene la oportunidad de tomar un trozo de tejido para su análisis;
  • biopsia: análisis de tejidos extraídos del área afectada por su pertenencia a un tipo específico de enfermedad, lo que permite prescribir el tratamiento más efectivo;
  • radiografía de garganta;
  • Imágenes por resonancia magnética y computarizada para determinar la localización de metástasis, su número y análisis del tamaño del tumor.

Tratamiento

Gracias al desarrollo de la medicina moderna y los logros de los oncólogos, hoy en día las neoplasias malignas que afectan el área de la nasofaringe no son una sentencia de muerte. Especialmente si el tratamiento se inicia en las primeras etapas de la enfermedad.

Para el tratamiento de un tumor en la garganta, se utilizan varios métodos que, en combinación, pueden prolongar la vida del paciente.

Quimioterapia. Este método de tratamiento se usa con mayor frecuencia como una de las etapas de la terapia compleja o precede a una operación. Para la quimioterapia, se utilizan medicamentos especiales que tienen un efecto depresor sobre las células tumorales, lo que conduce a una disminución gradual en su número y la intensidad de la división. Además, es posible actuar tanto localmente, directamente en el sitio de localización del tumor, como en todo el cuerpo en su conjunto.

Terapia de radiación. En este caso, se utiliza un método de exposición directa a las células cancerosas con radiación especial de alta frecuencia. Debido al hecho de que la radiación afecta la lesión, muere una gran cantidad de células patógenas. El tratamiento con radioterapia ralentiza significativamente el crecimiento y desarrollo de un tumor maligno o conduce a una inhibición completa de las células patógenas.

La radiación de alta frecuencia se dirige al área afectada de dos maneras:

  • exposición interna: los componentes radiactivos se introducen en el área de la neoplasia mediante un catéter o inyecciones;
  • Influencia externa: en este caso, el efecto sobre el tumor se lleva a cabo mediante un flujo de radiación dirigido.

El método de tratamiento de un tumor maligno mediante radioterapia es uno de los métodos más eficaces. Sin embargo, este método tiene varias contraindicaciones:

  • daño a los tejidos cartilaginosos de la región nasofaríngea;
  • germinación de neoplasias en vasos sanguíneos y tejido esofágico;
  • no recomendado para pacientes con inmunidad severamente debilitada.

En las últimas etapas del desarrollo de la enfermedad, el método de radioterapia, así como la quimioterapia, precede a la cirugía.

Tratamientos quirúrgicos. Este método de tratamiento de cánceres de laringe también es eficaz. Muy a menudo, la operación está indicada en las primeras etapas de la enfermedad o en una terapia compleja. Junto con la radioterapia, la intervención quirúrgica le permite eliminar posibles metástasis, lo que evitará la posibilidad de una mayor propagación de células patógenas. La intervención quirúrgica se puede llevar a cabo mediante el método láser, que le permite realizar una incisión sin sangre en los tejidos de la faringe y eliminar el foco de inflamación.

Profilaxis

Como se señaló anteriormente, el riesgo de desarrollar neoplasias malignas en la garganta aumenta significativamente en personas con malos hábitos. Por lo tanto, dejar de fumar, el alcohol y otras adicciones se puede atribuir a una de las formas más efectivas de prevenir la enfermedad.

Llevar una dieta saludable también es una medida preventiva importante para el cáncer de laringe. El uso de productos alimenticios saludables fortificados, la exclusión de alimentos picantes, ahumados y demasiado salados reduce significativamente la probabilidad de desarrollar neoplasias malignas.

Otra medida preventiva importante es el examen oportuno.

Cualquier deterioro de la salud (dolor de garganta, tos, ronquera) no asociado a enfermedades infecciosas debe ser motivo de consulta con un oncólogo.