Cardiología

Taponamiento cardíaco: las principales características de la afección y los métodos para tratarla.

El taponamiento cardíaco es una condición patológica que se desarrolla como resultado de la acumulación de líquido entre dos láminas del pericardio. Como resultado, el corazón no puede contraerse completamente porque sus cámaras están comprimidas. La enfermedad se produce en el contexto de enfermedades o lesiones tanto crónicas (pericarditis) como agudas. Este proceso puede conducir al desarrollo de un shock cardíaco y, en consecuencia, la muerte, por lo tanto, requiere atención médica inmediata.

Las razones del desarrollo de la condición.

Normalmente, hay una pequeña cantidad de líquido entre las capas del pericardio, que actúa como lubricante y barrera protectora. Si por algún proceso patológico aumenta su volumen o entra sangre en la cavidad, la presión aumenta y las cavidades cardíacas se comprimen. La sangre no fluye a las aurículas ni a los ventrículos, lo que hace que el corazón se detenga.

Como ya se mencionó, la patología puede desarrollarse de forma crónica y aguda.

En el primer caso, el líquido llena gradualmente la cavidad pericárdica, se estira y puede albergar un volumen significativo (más de 1 litro). En este caso, se desarrolla insuficiencia cardíaca crónica.

Esta opción se produce debido a una pericarditis exudativa, cuyas causas pueden ser:

  • enfermedades infecciosas;
  • patologías autoinmunes;
  • neoplasias oncológicas;
  • endocrinopatía.

Si la afección se desarrolla rápidamente (por ejemplo, con hemotaponamiento debido a una lesión penetrante), el pericardio no puede adaptarse y se produce un síndrome de insuficiencia cardíaca aguda.

Manifestaciones clínicas y síntomas típicos.

Los síntomas dependen de la patogenia de la enfermedad. En el caso de la inflamación crónica del pericardio, el cuadro clínico se desarrolla lentamente, en el contexto de la enfermedad subyacente. En este caso, los siguientes signos son los más característicos:

  • malestar, sensación de pesadez en el pecho;
  • disnea
  • debilidad;
  • La frecuencia cardíaca está aumentando, pero el pulso es débil, apenas palpable;
  • cianosis, sudoración.

La clínica pronunciada del taponamiento se manifiesta por la llamada tríada de Beck:

  • presión arterial baja;
  • hinchazón de las venas del cuello;
  • tonos apagados en la auscultación.

Con hemopericardio, la clínica se desarrolla rápidamente, los síntomas son pronunciados:

  • dolor agudo y agudo detrás del esternón (especialmente con un músculo cardíaco roto);
  • Tríada de Beck;
  • la desaparición del pulso al inhalar;
  • alteración de la conciencia (hasta desmayos)
  • palidez de la piel y cianosis de la cara.

Diagnóstico

En el examen físico, se observan los siguientes síntomas:

  • Tríada de Beck;
  • expansión de los límites del corazón (percusión);
  • debilitamiento o desaparición completa del impulso cardíaco.

El ECG muestra una imagen bastante inespecífica: una disminución del voltaje, arritmias, taquicardia, alternancia eléctrica.

Radiografía de tórax: bordes agrandados del corazón.

El método principal para diagnosticar esta condición es la ecocardiografía. Este método le permite:

  • detectar líquido en las cavidades pericárdicas y determinar su cantidad;
  • medir el gasto cardíaco, lo que permite juzgar la gravedad;
  • examinar el miocardio y los vasos grandes en busca de lesiones traumáticas;
  • para revelar colapso diastólico del ventrículo derecho.

En algunos casos, se realiza una ecocardiografía transesofágica.

Algoritmo de atención y tratamiento de emergencia

El taponamiento cardíaco es una afección potencialmente mortal que requiere cuidados intensivos y cirugía inmediatos.

Para mantener la hemodinámica y el equilibrio hidroelectrolítico, se administra al paciente una infusión de cristaloides, albúmina o plasma. Con insuficiencia respiratoria significativa, está indicada la ventilación artificial.

El principal método de tratamiento es la pericardiocentesis: punción (punción) de la bolsa del corazón y extracción del líquido acumulado. Esto alivia la tensión en el corazón y restaura la circulación sanguínea normal. El contenido seleccionado se envía para examen patológico. El procedimiento generalmente se lleva a cabo bajo la supervisión de ECHO-KG.

Después de la estabilización del estado, se introduce drenaje en la cavidad pericárdica para drenar el exudado y prevenir recaídas, mientras se continúa la terapia de infusión.

Se lleva a cabo un tratamiento adicional según la causa. Para procesos inflamatorios e infecciosos, se muestran los siguientes medicamentos:

  • antibióticos
  • glucocorticosteroides;
  • fármacos anti-inflamatorios no esteroideos.

En casos más difíciles, se realiza una cirugía abierta: pericardiotomía. En este caso, se hacen agujeros en la pared para inspeccionar la cavidad y el drenaje.

Con el hemotaponamiento, un requisito previo es la eliminación de la fuente de hemorragia en el pericardio. La operación consiste en suturar heridas de miocardio o grandes vasos.

Posibles complicaciones

Esta condición crítica, si el tratamiento es incorrecto o retrasado, puede provocar complicaciones graves.

En el período agudo, hay:

  • shock cardiaco;
  • la muerte súbita;
  • infarto de miocardio;
  • arritmias.

En una etapa posterior, se desarrolla lo siguiente:

  • pericarditis fibrinosa;
  • miocardiosclerosis;
  • arritmias.

Conclusiones

El taponamiento cardíaco, independientemente de su causa, es una afección potencialmente mortal que requiere hospitalización inmediata y tratamiento intensivo. La compresión del líquido acumulado de las aurículas y los ventrículos conduce a una disminución significativa de la fracción de eyección y, como resultado, a trastornos circulatorios y paro cardíaco.

Si encuentra algún signo de insuficiencia cardíaca aguda, como dificultad para respirar, dolor en el pecho y cianosis, debe llamar inmediatamente a una ambulancia. Con un tratamiento oportuno, el pronóstico de vida es favorable.