Síntomas de la garganta

Dolor de garganta y fiebre 37 - 38 ° C

La hipertermia y la inflamación de la mucosa laríngea son signos claros del desarrollo de una enfermedad infecciosa. Si el paciente tiene dolor de garganta, dolor al tragar y fiebre, es necesario conocer el tipo de enfermedad otorrinolaringológica y someterse al tratamiento adecuado.

Como regla general, los síntomas característicos surgen debido al desarrollo de flora bacteriana o viral en el tracto respiratorio. Un aumento de temperatura ocurre como resultado de la activación de los mecanismos de defensa del cuerpo.

Vale la pena señalar que la temperatura normal se considera 36.6-36.8, subfebril - 37-38, febril - 38-41, hipertérmica - más de 41 grados. Ingesta tardía de antipiréticos, p. Ej. antipiréticos, pueden causar insolación, convulsiones febriles en niños y muerte en pacientes con patologías cardiovasculares.

Hipertermia: ¿buena o mala?

La hipertermia es una reacción protectora y adaptativa que se produce en respuesta a la influencia negativa de los estímulos patógenos. El aumento de temperatura hace que los tejidos se calienten y los vasos sanguíneos se dilaten, lo que ejerce una presión excesiva sobre el sistema cardiovascular. Por esta razón, se recomienda adherirse estrictamente al reposo en cama durante el período de exacerbación de las enfermedades respiratorias.

El estado febril juega un papel importante en el proceso de destrucción de la flora patógena en los focos de inflamación. La hipertermia contribuye a:

  • la creación de condiciones desfavorables para la reproducción de microorganismos patógenos en los focos de inflamación;
  • producción intensiva de interferón, que previene el desarrollo de virus patógenos;
  • estimulación de los mecanismos de defensa y aumento de la inmunidad local.

La fiebre subfebril y febril conduce a la interrupción del metabolismo del agua y la sal en los tejidos, lo que puede causar deshidratación.

La fiebre suele ir acompañada de pérdida de apetito y debilidad muscular. Por lo tanto, el cuerpo "intenta" ahorrar energía al digerir los alimentos y suministrar nutrientes al tejido muscular. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que la intoxicación severa causada por la acumulación de metabolitos de agentes patógenos en los tejidos solo empeora el bienestar del paciente. Para acelerar el proceso de eliminación de sustancias tóxicas de la sangre, durante el tratamiento de la patología otorrinolaringológica, es necesario consumir al menos 2 litros de bebida tibia por día.

Etiología

El desarrollo de enfermedades infecciosas se ve facilitado por una fuerte disminución de la resistencia del cuerpo. Los niños en edad preescolar se enferman con más frecuencia que los adultos, lo que se debe a la práctica ausencia de inmunidad específica (adquirida). La reproducción de microorganismos oportunistas en los órganos ORL puede ser provocada por:

  • hipotermia severa;
  • aclimatación;
  • mala ecología;
  • enfermedades crónicas;
  • hipovitaminosis;
  • abuso de antibióticos;
  • inmunodeficiencia secundaria;
  • lesión mecánica de las membranas mucosas de la garganta;
  • caries y estomatitis;
  • rinitis crónica;
  • contacto con pacientes infectados.

Incrementar la inmunidad general y local del niño permite la ingesta de complejos vitamínicos-minerales e inmunoestimulantes. Sin embargo, los medicamentos solo deben ser recetados por pediatras debido a la posible manifestación de reacciones adversas.

Enfermedades otorrinolaringológicas comunes

¿Qué hacer si me duele mucho la garganta, me duele tragar y hay temperatura? Las manifestaciones clínicas no son específicas, por lo tanto, es posible determinar con precisión el tipo de enfermedad otorrinolaringológica solo después de pasar un examen por parte de un especialista. Los síntomas típicos pueden indicar el desarrollo de las siguientes patologías en niños y adultos:

  • laringitis;
  • faringitis;
  • epiglotitis;
  • escarlatina;
  • amigdalitis;
  • sarampión;
  • difteria;
  • gripe.

El tratamiento sintomático con medicamentos tópicos elimina las manifestaciones desagradables de la enfermedad, pero no destruye la flora patógena en los focos de inflamación.

La deglución dolorosa de saliva se produce debido a la inflamación de las membranas mucosas de la garganta.

En el proceso de deglución, los músculos de la faringe se contraen, como resultado de lo cual se cierra el cartílago de la epiglotis, lo que evita la penetración de líquido en la tráquea y el tracto respiratorio inferior. En el caso de la inflamación del tejido catarral o purulento, los pacientes sienten dolor en la garganta.

Laringitis

La laringitis es una inflamación infecciosa de la membrana mucosa y las cuerdas vocales en la laringe, que con mayor frecuencia es promovida por hipotermia, sobreesfuerzo de la faringe, lesión mecánica, inhalación de aire polvoriento, etc. El desarrollo de patología puede estar precedido por sarampión, neumonía, amigdalitis, rinitis bacteriana o bronquitis. Las principales manifestaciones clínicas de la enfermedad incluyen:

  • dolor de garganta;
  • dolor al tragar saliva;
  • ronquera de voz;
  • fiebre subfebril;
  • tos productiva (húmeda);
  • debilidad muscular;
  • rinitis.

¡Importante! El sobreesfuerzo de las cuerdas vocales evita la recuperación, por lo tanto, durante el período de inflamación aguda de los órganos otorrinolaringológicos, no se recomienda que el paciente hable.

La enfermedad es especialmente peligrosa para los niños menores de 7-8 años, lo que se asocia con el riesgo de un crup falso. El edema laríngeo y los espasmos de la glotis pueden causar hipoxia.

Los ataques de tos que ladra interfieren con la respiración normal y el intercambio de gases en los tejidos, lo que puede provocar asfixia. En caso de ataque es necesario llamar al equipo de ambulancia. Con un tratamiento oportuno y adecuado de la laringitis, la inflamación desaparece en 7-10 días. Ignorar el problema provoca complicaciones y cronicidad de los procesos patológicos.

Los pacientes con laringitis crónica se quejan de fatiga rápida, ronquera, dolor de "rascado" en la garganta al tragar, etc.

Faringitis

La faringitis es una enfermedad viral caracterizada por la inflamación de los tejidos linfoides y las membranas mucosas de la garganta. Los provocadores de los procesos patológicos son los adenovirus y los rinovirus. En ausencia de una terapia adecuada, los microbios pueden unirse a la flora viral, a saber, estafilococos, neumococos, etc., que provocan una inflamación purulenta de los tejidos del anillo linfadenoide.

Las manifestaciones clínicas están determinadas en gran medida por la naturaleza de la enfermedad otorrinolaringológica. En el caso del desarrollo de faringitis aguda, los niños y adultos se quejan de:

  • fiebre subfebril;
  • tos seca y dolorida;
  • dolor al tragar saliva;
  • dificultad para respirar;
  • la presencia de signos de intoxicación.

Un examen visual de la membrana mucosa de la orofaringe revela hiperemia (enrojecimiento) de los tejidos linfoides, ulceración e hinchazón de la garganta. En el caso del desarrollo de faringitis crónica, los síntomas son menos pronunciados. Los pacientes pueden quejarse de ronquera, dolor de garganta y tos ocasional. Durante una exacerbación de la inflamación, las manifestaciones clínicas de la patología no son diferentes de los síntomas de la faringitis aguda.

Epiglotitis

La epiglotitis es un proceso inflamatorio en la epiglotis y las principales partes de la faringe, resultante del desarrollo de bacterias como la hemophilus influenzae. La enfermedad ocurre con mayor frecuencia en niños de 2 a 5 años, sin embargo, en casos raros, la patología también se diagnostica en adultos. El peligro de la epiglotitis radica en el rápido desarrollo de procesos patológicos, como resultado de lo cual aparecen los siguientes síntomas en los pacientes durante varias horas:

  • fiebre;
  • aumento de temperatura;
  • malestar al tragar;
  • salivación profusa;
  • dificultad para respirar;
  • disfonía (voz nasal).

La penetración de virus y bacterias en la capa submucosa de la faringe provoca edema tisular, como resultado de lo cual hay un estrechamiento de la luz de las vías respiratorias.Debido a la ruptura de pequeños capilares sanguíneos, se encuentran impurezas sanguinolentas en la saliva.

Hay varias formas principales de epiglotitis:

  • absceso
  • edematoso
  • infiltrante.

El tratamiento tardío de la enfermedad en el 10% de los casos conduce al desarrollo de neumonía y pericarditis.

El mayor peligro para la salud del niño está representado por abscesos y epiglotitis infiltrativa, que se asocia con un aumento de la temperatura a niveles febriles, dolor severo en la faringe, sensación de falta de aire e hinchazón de las vías respiratorias.

Amigdalitis

La amigdalitis o amigdalitis es un proceso inflamatorio en formaciones linfadenoides, es decir amígdalas palatinas. Los agentes causantes de la infección suelen ser bacterias, en particular estafilococos y estreptococos beta-hemolíticos. La inflamación aguda provoca un aumento de la temperatura a niveles febriles, lo que afecta negativamente el bienestar del paciente. En las etapas iniciales del desarrollo de la enfermedad, los pacientes se quejan de:

  • sensación de ardor en las amígdalas;
  • hipertermia;
  • dificultad para tragar
  • tos seca;
  • falta de apetito;
  • mialgia;
  • dolor de garganta;
  • náuseas y vómitos;
  • mal aliento.

Existen varias formas principales de amigdalitis, cada una de las cuales se caracteriza por la manifestación de ciertos síntomas:

Hipertermia con amigdalitis.

Tipo de amigdalitisManifestaciones clínicasIndicadores de temperatura corporal
catarralhiperemia de la faringe y las amígdalas palatinas, dolor al tragar saliva, agrandamiento de los ganglios linfáticos regionales37-38
folicularacumulación de masas purulentas en los folículos (rayas blancas en las amígdalas), dolor al tragar, que se irradia a los oídoshasta 38,5-39
lacunarfloración blanca en la raíz de la lengua y la garganta, tapones amarillentos en las lagunas palatinas (amigdalolitis)39-40
flemáticodolor de garganta, aumento de la salivación, agrandamiento de una o ambas amígdalas palatinas39-40
fibrosopelícula blanca en la superficie de las amígdalas, dolor en la cabeza y la garganta38.5-40
necrótico ulcerativoun ligero aumento en una de las amígdalas, ulceración de la mucosa faríngea, placa gris en las amígdalas37-38

En los niños pequeños, la angina de pecho a menudo ocurre en el contexto del desarrollo de la escarlatina, en la que se produce enrojecimiento en la faringe y la faringe. La hiperemia de las membranas mucosas y la inflamación aguda de los tejidos linfoides provocan un dolor intenso al tragar saliva y hablar.

¡Importante! El desarrollo de la escarlatina se indica mediante una pequeña erupción que se produce en la piel.

Sarampión

El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa caracterizada por inflamación de las vías respiratorias, fiebre febril, conjuntivitis y erupciones cutáneas papulares. La patología infecciosa ocurre con mayor frecuencia en niños menores de 5 años y es una de las enfermedades infantiles más formidables.

Según la OMS, al menos 150 mil personas mueren de sarampión cada año, la mayoría de los cuales son niños en edad preescolar. El agente causante de la infección es un virus de ARN, que se transmite por gotitas en el aire. En el 95% de los casos, la enfermedad se diagnostica en niños de 2 a 5 años.

La peculiaridad de la patología radica en el hecho de que la flora patógena, que penetra en las vías respiratorias y, en consecuencia, en la sangre, afecta absolutamente a todos los tipos de células inmunocompetentes blancas.

El período de incubación para el desarrollo del virus ARN es en promedio de 8 a 10 días. La infección de los órganos otorrinolaringológicos suele estar indicada por los siguientes síntomas:

  • alta temperatura (39-40 grados);
  • secreción nasal severa;
  • enanthem del sarampión;
  • malestar al tragar;
  • dolor de cabeza;
  • fotofobia;
  • ronquera de la voz;
  • hiperemia de la faringe;
  • estornudos constantes.

Aproximadamente en el día 4-5 del desarrollo de la enfermedad, el niño desarrolla un exantema de sarampión, es decir, erupción cutánea papular. Si experimenta síntomas característicos, debe buscar la ayuda de un pediatra.

La terapia tardía puede causar complicaciones graves, en particular linfadenitis y encefalitis por sarampión.

El tratamiento inadecuado del sarampión provoca un mal funcionamiento del sistema nervioso central y estenosis de la laringe.

Los adultos que no han tenido sarampión en la infancia son difíciles de tolerar la enfermedad. Los pacientes se quejan de fatiga general, dificultad para respirar, fiebre febril y dolor intenso en la garganta. A menudo, en los adultos, las complicaciones surgen en forma de inflamación bacteriana de la orofaringe y neumonía por sarampión.

Gripe

La influenza es una enfermedad respiratoria en la que hay una inflamación catarral de las vías respiratorias. Absolutamente todas las categorías de personas están predispuestas a la patología viral, por lo que no solo los niños, sino también los adultos pueden enfermarse de gripe. La puerta de entrada para la infección viral son las membranas mucosas de los bronquios, la boca, la nariz y la tráquea. La infección penetra rápidamente en las células del epitelio ciliado, provocando inflamación e hinchazón de los tejidos.

Los síntomas de la gripe no son específicos, por lo que es casi imposible determinar con precisión el tipo de enfermedad respiratoria sin pruebas de laboratorio.

La gravedad de la patología puede variar de leve a hipertoxica, que es más común en niños pequeños. El desarrollo de una infección típica de influenza está indicado por las siguientes manifestaciones clínicas:

  • fiebre;
  • mialgia;
  • escalofríos;
  • fatiga;
  • nariz que moquea;
  • dolor de garganta;
  • malestar al tragar;
  • calor;
  • tos seca y espasmódica.

La gripe severa está plagada del desarrollo de colapso vascular, que puede causar inflamación del cerebro.

Las formas moderadamente graves de enfermedad otorrinolaringológica pueden causar complicaciones sistémicas y locales graves, que se asocian con las peculiaridades del curso de los procesos patológicos en el cuerpo. Una infección viral tiene un efecto capilarotóxico pronunciado, como resultado de lo cual se observa una disminución en la reactividad del tejido.

Difteria

La difteria es una inflamación bacteriana de las membranas mucosas de la orofaringe, los bronquios y la laringe. La gravedad de la patología se debe en gran parte a la acumulación de una cantidad excesiva de sustancias tóxicas en los tejidos, que son secretadas por el bacilo diftérico. Si la flora patógena afecta no solo la orofaringe, sino también las vías respiratorias, además de la intoxicación general, no se excluye el desarrollo de estenosis faríngea, en la que hay un estrechamiento de la luz de las vías respiratorias.

El crup diftérico es una forma común de enfermedad otorrinolaringológica, que se caracteriza por una lesión predominante de la mucosa laríngea. La flora bacteriana se localiza en la laringe, tráquea y bronquios, como resultado de lo cual hay hinchazón de las membranas mucosas de los órganos ENT. Como regla general, la enfermedad se acompaña de las siguientes manifestaciones clínicas:

  • calor;
  • debilidad muscular;
  • un aumento de las amígdalas palatinas;
  • una capa fina en la garganta;
  • dificultad para tragar
  • dolor de garganta;
  • un aumento de los ganglios linfáticos regionales.

La difteria tóxica e hipertoxica requiere tratamiento médico inmediato. En los niños en edad preescolar, la enfermedad causa convulsiones febriles, pérdida del conocimiento, formación de una erupción hemorrágica en la piel, etc. En el caso de un aumento de la insuficiencia cardiovascular debido al colapso capilar, la muerte ocurre aproximadamente 3-4 días después del inicio de los síntomas graves.

Características de la farmacoterapia.

El tratamiento de enfermedades otorrinolaringológicas solo puede ser prescrito por un especialista calificado después de un diagnóstico preciso. La terapia paliativa (sintomática) tiene como objetivo solo aliviar los síntomas de la enfermedad. Para eliminar la causa del problema, es necesario someterse a un curso de terapia antibacteriana o antiviral con el uso de medicamentos de acción patogénica.

El esquema de tratamiento complejo de enfermedades infecciosas, acompañado de molestias en la garganta e hipertermia, incluye los siguientes tipos de medicamentos:

  • antibióticos - "Augmentit", "Amoxiclav", "Eritromicina", "Cefalexina";
  • agentes antivirales - "Arbidol", "Ingavirin", "Amiksin", "Arpeflu";
  • medicamentos antiinflamatorios: Ketorol, Aertal, Nurofen, Diklonak;
  • antisépticos para el saneamiento de la garganta: Angilex, Clorhexidina, Rekutan, Hepilor;
  • aerosoles de irrigación de garganta - Ingalipt, Stopangin, Cameton, Teraflu;
  • pastillas - "Travisil", "Septolete", "Grammidin", "Faringosept";
  • medios para lubricar la garganta - "Carotolin", "Solución de Lugol", "Lugs", "Yoks".

Si un niño o un adulto tiene fiebre, puede utilizar antipiréticos: Coldact, Paracetamol, Panadol, Efferalgan, etc. Las personas que padecen insuficiencia hepática necesitan utilizar hepatoprotectores en paralelo. Previenen la creación de cargas excesivas en los órganos de desintoxicación, reduciendo así la probabilidad de intoxicación por drogas en el cuerpo.