Enfermedades de la nariz

El mecanismo de formación y las consecuencias de un quiste en el seno maxilar.

Las neoplasias benignas de los senos maxilares suelen ser el resultado de un proceso inflamatorio prolongado. Se trata de pequeñas burbujas elásticas, en cuyo interior se acumula líquido. La mayoría de las veces, los quistes no son peligrosos para la salud, pero en algunos casos pueden causar complicaciones graves, hasta el cese completo de la respiración durante el sueño. Para evitar tal resultado, la patología debe ser diagnosticada a tiempo por un médico.

Mecanismo de formación

Un quiste del seno maxilar es una consecuencia del bloqueo o el crecimiento excesivo completo de los conductos a través de los cuales se excreta el moco. La obstrucción no afecta la producción de secreciones, las glándulas la producen activamente. Dado que el contenido no tiene adónde ir, comienza a acumularse debajo de la membrana mucosa. Se forma un pequeño quiste, que es una especie de depósito para almacenar moco.

Los quistes son muy "parecidos" a estar ubicados en los senos maxilares, pueden formarse en las paredes externas e internas.

Si el tamaño de la burbuja es inferior a 1 cm, entonces no hay nada que temer, no causa molestias y no tiene un efecto negativo en la condición del paciente.

Sin embargo, también existen neoplasias que llenan completamente la cavidad sinusal, en tales casos, se recomienda encarecidamente su eliminación.

Variedades de neoplasias.

Un quiste en el seno maxilar puede provocar diversas consecuencias que afectan negativamente al bienestar del paciente y a su calidad de vida. Para evitar posibles complicaciones, es importante determinar a tiempo el tipo de neoplasias, su tamaño y ubicación. Los expertos distinguen varios tipos principales de burbujas:

  • Odontogénico. Formado debido a la penetración de infecciones desde los dientes hasta los conductos radiculares. Incluso las caries banales pueden convertirse en la razón. Las bacterias, que penetran en el área del hueso, destruyen sus tejidos y forman huecos. Para separar las células sanas de las células infectadas, el cuerpo activa la protección, comienza a producir burbujas con líquido, que sirven como una especie de barrera.
  • Tales neoplasias pueden desaparecer por sí solas tan pronto como se elimine la causa principal: la inflamación en el conducto radicular. Sin embargo, también es posible otro escenario. Si el quiste no se detecta a tiempo, puede aumentar gradualmente de tamaño, provocando necrosis del tejido óseo, incluso puede suceder que el hueso desaparezca por completo. Además, la formación comprime el seno maxilar, lo que provoca un dolor intenso.
  • Retencion. Este es el nombre de los verdaderos quistes, cuya formación no está asociada con la inflamación de los dientes o las encías. Aparecen debido a la interrupción del funcionamiento de los conductos que excretan moco. La ubicación de tales neoplasias puede ser diferente, la mayoría de las veces están unidas a la parte inferior de las paredes externas de los senos nasales. En su interior hay un epitelio columnar, que también produce un secreto. Con un aumento de tamaño, las paredes de las burbujas se vuelven delgadas, si no nota el crecimiento de los sacos quísticos a tiempo, pueden estallar y la infección llegará a los órganos y la sangre cercanos.
  • Quiste del seno maxilar derecho. Un rasgo característico que el paciente puede notar es la secreción periódica de moco por la fosa nasal derecha. Solo se puede obtener información más precisa sobre la neoplasia mediante la realización de estudios especiales de laboratorio y aparatos.
  • Quiste del seno maxilar izquierdo. La situación con este tipo de quiste es exactamente igual que con el anterior. La única diferencia es que la secreción de moco se observa en la fosa nasal izquierda.

Cómo reconocer una enfermedad

El crecimiento de quistes odontogénicos no se acompaña de ningún síntoma. El sitio de la lesión no duele, no pica, la neoplasia no es palpable a la palpación. Lo mismo ocurre con el tipo de retención. Es por esta razón que un simple examen del paciente no da ningún resultado; solo se utilizan hardware y pruebas de laboratorio para hacer un diagnóstico:

  • examen endoscópico;
  • radiografía;
  • Imagen de resonancia magnética;
  • Tomografía computarizada;
  • biopsia.

También se pueden solicitar pruebas de laboratorio adicionales para la mucosidad nasal.

El cultivo bacteriano ayuda a identificar la presencia de una infección bacteriana en el foco del trastorno. Se realiza un análisis químico general de la sangre para identificar complicaciones concomitantes en forma de proceso inflamatorio. Solo después de que se haya realizado un diagnóstico preciso, al paciente se le prescribe terapia o cirugía.

Métodos de eliminación

Si hay al menos una complicación grave causada por un quiste del seno maxilar, el médico puede decidir realizar una operación. Una indicación de este tipo de eliminación del problema es también un rápido aumento en el tamaño de la neoplasia y la detección de contenidos purulentos en ella. Los métodos más comunes de intervención quirúrgica son:

  • resección clásica (el acceso a la neoplasia se proporciona a través de tejidos sanos, que se dañan durante la operación);
  • extracción con láser (un rayo láser dirigido literalmente "quema" el quiste, pero es posible que se produzcan lesiones en áreas sanas poco espaciadas de la membrana mucosa);
  • extirpación endoscópica (realizada con un endoscopio, muestra una imagen de la cavidad interna de los senos nasales y la neoplasia en sí, los microinstrumentos le permiten extirpar solo el quiste sin afectar las membranas mucosas sanas).

En algunos casos, el médico le recetará medicamentos. Esto es posible solo cuando el tamaño del quiste no excede 1 cm. Casi todos los medicamentos tienen como objetivo no eliminar la neoplasia en sí, sino suprimir los síntomas.

Se pueden recetar antibióticos para suprimir la infección, antihistamínicos para estabilizar el fondo alérgico, gotas vasoconstrictoras y aerosoles para aliviar la hinchazón.

¿Qué pasa si no va al médico a tiempo?

Aquellos que han encontrado un quiste en el seno maxilar, pero no se les ha prescrito una operación, deben ser examinados regularmente por un otorrinolaringólogo y tomar radiografías, para que el médico pueda controlar el estado de la neoplasia. Si está indicada una intervención quirúrgica, debe realizarse en cualquier caso. Si ignora esto, pueden surgir consecuencias tan graves:

  1. Deformación de los huesos del cráneo. El quiste, que aprieta constantemente el seno maxilar, con el tiempo comenzará a presionar los huesos del cráneo, que está plagado de dolores de cabeza intensos y persistentes.
  2. Problemas de la vista. Una neoplasia agrandada puede comprimir el nervio óptico, debido a esto, una persona tiene visión doble, la visión comienza a disminuir bruscamente y es posible su pérdida completa.
  3. Inflamación crónica. Si el quiste no se extrae a tiempo, se pueden desarrollar rinitis y sinusitis crónicas. Se proporciona una descarga constante de moco de la nariz con una mezcla de pus para aquellos que no desean aceptar la operación.
  4. Falta de oxígeno. Si una persona no puede respirar normalmente por la nariz, el intercambio de gases no se produce al nivel adecuado en sus alvéolos. Esto significa que todas las células del cuerpo no reciben suficiente oxígeno. La falta de oxígeno se manifiesta por fatiga constante, disminución de la actividad física y cerebral, apatía, disminución de la concentración y otros signos, y también afecta negativamente el trabajo del sistema cardiovascular.
  5. Dolores de cabeza severos. El síndrome de dolor puede tener una ubicación diferente. En las primeras etapas de la exacerbación, el paciente experimenta molestias solo en el área del seno afectado, pero luego la cabeza comienza a doler por completo.
  6. Propagación de la infección.Si el saco quístico se revienta por sí solo, lo que ocurre con bastante frecuencia, parte de su contenido saldrá por la nariz. La otra parte se propagará a otros órganos y tejidos, provocando que se infecten. Incluso es posible una intoxicación grave de todo el organismo.

Profilaxis

Las personas que padecen rinitis frecuentes y otras infecciones del tracto respiratorio superior deben ser especialmente cuidadosas y atentas a su salud.

La forma más fácil es prevenir la aparición de quistes, ya que no se puede predecir su comportamiento posterior. Algunos pacientes viven felices con neoplasias y no experimentan ninguna molestia, mientras que otros tienen muchas complicaciones.

Las medidas preventivas ayudarán a prevenir un fenómeno tan desagradable:

  • observancia de la higiene oral y nasal;
  • visita oportuna al dentista y tratamiento de todas las enfermedades dentales;
  • tratamiento completo de enfermedades del tracto respiratorio superior;
  • fortalecer el sistema inmunológico;
  • buscar ayuda médica de inmediato.

Resumamos

No debe tener miedo de un quiste del seno maxilar: esta es una neoplasia benigna. Sin embargo, no puede ignorar la infracción, si ya existe, entonces debe realizar una operación o someterse sistemáticamente a exámenes. Las consecuencias negativas solo pueden ser causadas por una actitud irresponsable hacia la salud, pero si se toman las medidas necesarias a tiempo, los quistes no causarán ningún daño a la salud.