Dolencias de garganta

Extirpación quirúrgica de adenoides

La extirpación de adenoides (adenotomía) se refiere a intervenciones quirúrgicas electivas en la práctica de otorrinolaringología. La operación no es compleja y se considera "streaming". Teniendo en cuenta su duración, frecuencia de ejecución y características técnicas, la operación se puede clasificar como intervenciones simples. El paciente rara vez se queda durante la noche después de la operación, generalmente después de 4-5 horas, los padres pueden llevar al niño a casa. La extirpación de la amígdala se puede realizar de forma ambulatoria, ya que las complicaciones en el postoperatorio son extremadamente raras.

¿Cuándo es necesaria la cirugía?

Muchos padres están interesados ​​en saber si se necesita una operación para extirpar las adenoides o si se puede prescindir del tratamiento farmacológico. La respuesta depende de la gravedad de la patología y la presencia de complicaciones. Por lo general, la adenotomía se realiza:

  • cuando la inflamación (adenoiditis) se vuelve crónica. Esto significa que un foco de infección está constantemente presente en el cuerpo, que está plagado de generalización del proceso;
  • con el rápido crecimiento del tejido linfoide; con dificultad para respirar nasal, cuando el niño respira constantemente por la boca, debido a lo cual la membrana mucosa de la orofaringe se seca y se lesiona. Además, los niños no duermen bien, se vuelven irritables, de mal humor y letárgicos; cuando el niño deja de respirar temporalmente durante el sueño. Esta condición se llama apnea, que resulta en la falta de oxígeno de los órganos internos y su disfunción;
  • con otitis media crónica. El desarrollo de inflamación en la sección del oído medio se debe a una disminución en la luz del tubo auditivo debido a la hinchazón de la membrana mucosa y al solapamiento parcial con crecimientos linfoides. El niño tiene problemas de audición y se queja de dolor de oído frecuente;
  • cuando el esqueleto facial cambia, cuando la boca está constantemente abierta y la expresión facial se vuelve abatida ("cara adenoidea").

La extirpación de adenoides en adultos es una operación muy rara, ya que después de 10 años el tejido linfoide sufre un desarrollo inverso, por lo que, en adultos, el problema de las adenoides no es relevante. La intervención se lleva a cabo solo con el desarrollo de un proceso maligno en la amígdala.

Etapa preparatoria

Antes de que se eliminen las adenoides, se realiza un examen completo del niño. En el momento de la preparación para la operación, los padres deben observar el comportamiento del niño, ya que la intervención no debe realizarse con un resfriado. Si se planea una adenotomía para un escolar, es recomendable realizarla durante las vacaciones, para que haya tiempo para restaurar la fuerza del cuerpo.

Los padres deben encargarse de la salida del niño de la escuela y los clubes con anticipación. También se recomienda visitar a un dentista. Por supuesto, no es una visita muy agradable, pero el tratamiento de los dientes cariados es imperativo para eliminar la infección de la cavidad bucal.

Se debe prestar especial atención al estado psicoemocional del niño. En el período preoperatorio, debe calmar al niño, pero no hablar sobre las complejidades del procedimiento y la fuerza del dolor. Es mejor prometer helado después de la cirugía, lo que mejorará significativamente el estado de ánimo del pequeño paciente.

Es necesario eliminar las adenoides después de un examen completo, identificando contraindicaciones y determinando el riesgo de cirugía. Se requiere la consulta con un anestesiólogo para la elección de la anestesia, la necesidad de sedación adicional y la implementación de las recomendaciones del médico. Se relacionan con la ingesta de alimentos y líquidos.

La cena debe ser a más tardar a las 19:00 horas de la víspera de la adenotomía.

El incumplimiento de las recomendaciones del anestesiólogo puede provocar la cancelación y el aplazamiento de la intervención para otro día, lo que supondrá un estrés adicional para el niño. Además, será muy difícil volver a ir al hospital sin la rabieta del niño.

Además, el cirujano indica cómo se extraerá la amígdala y cuáles son las características del postoperatorio.

Anestesia

Los padres, no menos que los niños, están interesados ​​en saber si es doloroso extirpar las amígdalas. Para calmarlos un poco a todos, te contamos qué tipos de analgésicos se pueden utilizar para los niños:

  • La anestesia local se selecciona teniendo en cuenta la edad, las enfermedades concomitantes y el estado psicoemocional del niño. Este alivio del dolor suele ser preferible para los niños mayores. Para asegurarse de que no haya dolor, se rocía un anestésico sobre la mucosa nasofaríngea y faríngea. En este caso, el paciente no siente dolor, pero los niños pueden tener miedo a la sangre, por lo tanto, los sedantes se administran adicionalmente por vía intramuscular. En su contexto, el pequeño paciente no reacciona de manera tan violenta a la manipulación, lo que tiene un efecto positivo no solo en la condición del niño, sino también en el curso de la intervención. Las ventajas incluyen la ausencia de reacciones secundarias y un menor costo. Si los padres hablan sobre el mal humor, el miedo y la vulnerabilidad del niño, no debe elegir la anestesia local;

No se realiza anestesia local si es alérgico a los anestésicos locales (lidocaína, novocaína).

  • La extirpación de adenoides bajo anestesia general se realiza con bastante frecuencia. El sueño tranquilo del niño no solo afecta positivamente su estado psicoemocional, sino que permite a los cirujanos realizar la extracción con mayor precisión. Por supuesto, a la hora de elegir la anestesia general, los padres deben considerar el riesgo, que se debe preguntar sobre el anestesiólogo para su tranquilidad;
  • hoy, no se realiza la extirpación de adenoides sin anestesia. Anteriormente, este tipo de operaciones se realizaban en la práctica de otorrinolaringología, lo que se explicaba por la ausencia de terminaciones nerviosas en la amígdala y la falta de dolor de la manipulación. No era del todo humano, por lo que hoy en día se utiliza la anestesia en cualquier caso, protegiendo los nervios de padres e hijos.

Cómo va la acción de la anestesia y cuáles son sus características, el anestesiólogo debe informar. La operación se lleva a cabo solo después del consentimiento voluntario de los padres. Si es necesario, el anestesiólogo puede derivar al paciente para un examen adicional y la consulta de especialistas (cardiólogo, nefrólogo).

Tipos de operaciones

Cuando se planea eliminar las adenoides, la operación se puede realizar de varias maneras:

  • el método clásico implica el uso de un adenotomo (un cuchillo especial en forma de anillo), que es necesario para eliminar las adenoides. Para la operación, se usa un espejo laríngeo, con la ayuda del cual el cirujano examina el campo operatorio. Las desventajas de esta intervención son el sangrado y la mala visibilidad. Debido a esto, el cirujano puede dejar un trozo de tejido hiperplásico, que luego se convertirá en la base de una recaída. Para detener el sangrado intraoperatorio, se utilizan láser, polvos u ondas de radio. En la otorrinolaringología moderna, se utilizan adenótomos de ondas de radio. Un cuchillo, que se pasa a través del tejido linfoide para extraerlo, sella simultáneamente los vasos dañados, evitando el desarrollo de sangrado;
  • el láser se considera un método menos traumático y preciso para realizar la adenotomía. Existen varios tipos de instrumentos, que se seleccionan teniendo en cuenta las características anatómicas y la gravedad de la enfermedad. Una ventaja integral es la esterilidad del campo operatorio, que se logra mediante la exposición al láser. Esto permite evitar complicaciones infecciosas. La cicatrización posoperatoria de las heridas es mucho más rápida;
  • La endoscopia se caracteriza por una buena visibilidad del campo operatorio. Se proporciona una vista completa con un videoendoscopio. El método endoscópico se refiere a métodos de intervención quirúrgica efectivos y de alta precisión, que le permiten extirpar completamente el tejido linfoide alterado y prevenir su nuevo crecimiento;
  • Coblation se refiere a desarrollos innovadores.La operación se realiza con la ayuda de un coblador, que le permite prevenir la pérdida de sangre, el dolor, acortar al máximo el período de rehabilitación y reducir el riesgo de complicaciones. El único inconveniente es el alto costo.

Complicaciones de la operación

Resulta que cortar las adenoides no es tan difícil, pero incluso una manipulación tan a corto plazo puede tener consecuencias indeseables. Entre las complicaciones, cabe destacar:

  • sangrado masivo en los períodos intra y postoperatorio. Para detener el sangrado, se usa el taponamiento y la coagulación del vaso sangrante. Se puede sospechar sangrado por coágulos y gotas de sangre que fluyen por la nariz.

El niño puede escupir sangre a medida que fluye por la pared faríngea posterior. Si la sangre entra en la laringe, es posible que se expulse sangre, lo que puede asustar mucho al niño y a los padres.

  • en el proceso de intervención, es posible un trauma en el paladar y complicaciones en forma de una reacción alérgica a los medicamentos utilizados para la anestesia;
  • Disminución temporal de la defensa inmunológica. Algunos padres piensan que después de la extracción de las adenoides, el niño se enfermará con más frecuencia, pero este no es el caso, porque la proliferación de tejido linfoide no cumple una función protectora. Se produce una disminución de la inmunidad después de la manipulación debido al estrés y el daño tisular, lo que provoca inflamación. Además, el niño está débil y mal alimentado en los primeros días, lo que también predispone a la infección y al desarrollo de un resfriado. En un mes, se restaura el sistema inmunológico. El alto riesgo de infección secundaria es la razón por la que los niños no deben ir a la escuela ni a los deportes en las próximas semanas después de la adenotomía;
  • Los ronquidos pueden ser molestos hasta 10 días después de que se extrae la amígdala. Aparece debido a la hinchazón de los tejidos lesionados y al deterioro de la permeabilidad de los conductos nasales;
  • Durante varias semanas, pueden persistir costras de sangre en la nasofaringe y pueden observarse vetas de sangre en las secreciones mucosas.

Período postoperatorio

Para mejorar el estado de ánimo de su hijo, puede comprar helado después de regresar a casa. No solo calmará al pequeño paciente, sino que también estrechará los vasos sanguíneos, evitando el desarrollo de sangrado. Para reducir el dolor al tragar, se pueden prescribir analgésicos en forma de aerosol para irrigar la garganta o en forma de tabletas.

Si el niño ha tragado sangre, es posible que vomite con una impureza sanguinolenta.

El primer día, la temperatura a veces sube a 38 grados.

Está indicado beber muchos líquidos para reducir la fiebre. De los medicamentos antipiréticos, está prohibido el uso de medicamentos a base de ácido acetilsalicílico. Puede interferir con la coagulación de la sangre y aumentar el riesgo de hemorragia.

En consulta con el médico, se pueden usar gotas nasales con efecto vasoconstrictor y astringente. Le permiten reducir la hinchazón de la membrana mucosa y restaurar la respiración nasal. Durante la primera semana de rehabilitación, está prohibido visitar lugares calientes (sauna), baños calientes y broncearse bajo el sol.

Se presta especial atención a una dieta nutritiva. Se excluyen los alimentos duros, fritos, picantes y el té caliente, que irritan la mucosa de la orofaringe. Los ejercicios de respiración también son útiles para normalizar la respiración nasal. Ayuda al niño a reorganizar la respiración por la boca a la nasal.

En las primeras 2-3 semanas después de la operación, la actividad física intensa y las situaciones estresantes están contraindicadas. Se recomienda pasar más tiempo al aire libre. La ventilación de la habitación se realiza cuando los niños no están en la habitación, ya que una corriente de aire solo puede agravar su condición.

Los padres deben comprender que el curso del período de rehabilitación también es importante en el tratamiento del niño. Ya un mes después de la adenotomía, el médico puede evaluar el éxito de la operación y dar más recomendaciones.