Medicamentos para la garganta

Pastillas dulces caseras para la tos

Efecto del azúcar quemado sobre la tos

La tos es un reflejo protector de nuestro cuerpo, que ayuda a eliminar cuerpos extraños, microorganismos y sus productos de desecho del tracto respiratorio. El broncoespasmo es seco y húmedo. El tratamiento de la tos seca, consecuencia del proceso inflamatorio en los órganos respiratorios, consiste en su transformación en forma húmeda. La flema ayuda a limpiar los bronquios y acelera la recuperación.

Una tos seca y molesta irrita la mucosa de la garganta, por lo que se recomienda al paciente medicamentos que tengan un efecto suavizante, hidratante y envolvente. El azúcar quemado es un remedio que tiene exactamente las propiedades que se necesitan en el tratamiento de la tos seca. Los caramelos de azúcar tienen un efecto suave, alivian la irritación de la membrana mucosa de los órganos respiratorios superiores. El azúcar quemada también ayuda un poco a diluir la flema. Las pastillas de azúcar están indicadas para su uso en faringitis aguda y crónica y otras infecciones virales respiratorias agudas, que se acompañan de secreción difícil de esputo.

Las pastillas dulces para la tos son uno de los medicamentos más populares entre los padres. Sin embargo, tenga cuidado, porque en la infancia, todos los procesos inflamatorios pueden extenderse a los órganos vecinos y una forma leve de un resfriado se convierte rápidamente en una enfermedad infecciosa aguda. No debe dejarse llevar por medicamentos sabrosos, ya que es difícil para los bebés toser la flema correctamente. El uso excesivo de antitusivos adelgazantes aumenta el volumen de flema y puede provocar insuficiencia respiratoria.

Es importante recordar que la tos seca es un síntoma no solo de un resfriado leve, sino también de enfermedades complejas como la neumonía y la tuberculosis. No experimente con su salud y disfrute de deliciosos dulces caseros solo después de que el médico haya determinado un diagnóstico preciso.

Recetas de dulces a base de azúcar

  • 1 vía. Caliente 1 cucharada de azúcar granulada a fuego lento. Después de unos minutos, el azúcar se oscurecerá y comenzará a derretirse. No te excedas con el azúcar, se puede quemar. Vierta la mezcla en un molde engrasado con aceite vegetal, pegue un palillo, un pincho (no olvide cortar primero la punta afilada) o un fósforo que se haya limpiado de azufre. La piruleta congelada está lista para comer.
  • Método 2. La receta es similar al método 1, pero debe verter el azúcar caliente en la leche a temperatura ambiente. El azúcar congelado tendrá un agradable sabor a caramelo. Verter la masa dulce caliente en leche fría creará dulces porosos. Tenga cuidado al succionar para evitar lesiones. Este medicamento está recomendado para escolares.
  • Método 3. Mezcle el azúcar caliente con un poco de mantequilla, pero no hierva la mezcla, de lo contrario, el azúcar y la mantequilla pueden separarse.
  • Método 4 (caramelos de colores). Necesitarás 200 g de azúcar, 3 cucharadas de jugo natural sin pulpa y 1 cucharadita de jugo de limón. Caliente todos los ingredientes en un refractario, revolviendo constantemente. Cuando la masa se vuelva dorada y fibrosa, retírela del fuego. El tiempo de calentamiento depende de la cantidad de ingredientes.

Si no tiene moldes especiales para dulces, cocine la mezcla hasta obtener una consistencia más espesa y extiéndala en gotitas sobre pergamino de cocina. Terminarás con lindos dulces en forma de gota.

Recetas de piruletas con azúcar agregada

Hacer caramelos de azúcar en casa es muy conveniente, ya que las recetas clásicas se pueden complementar y variar según tus preferencias gustativas. Vale la pena utilizar los ingredientes que están a tu alcance. Es muy útil agregar extractos esenciales de grado alimenticio a las pastillas.

  1. Caramelos de menta. 1 cucharada de menta seca y manzanilla, 1 cucharada de café de jengibre y canela (puede usar un palito), vierta un vaso incompleto de agua caliente y hierva durante 10-15 minutos. Retire el té de hierbas, déjelo durante media hora. Colar el caldo tibio. Agrega 180 g de azúcar, lleva a ebullición y cocina. Para controlar el régimen de temperatura, use un termómetro de cocina; la temperatura de la mezcla no debe ser superior a 150 grados. Cuando la masa se vuelva espesa y fibrosa, retírela del fuego y enfríe, revolviendo constantemente. Agrega unas gotas de concentrado esencial. Use una cuchara pequeña para esparcir la mezcla en un molde de silicona o sobre papel pergamino. Espolvorea los dulces terminados con almidón, esto evitará que se peguen. Colóquelos en un recipiente o bolsa de vidrio y guárdelos en un lugar fresco.
  2. Caramelos de limón. Preparar el azúcar quemado: Hervir 150 g de azúcar durante unos 20 minutos hasta que estén dorados y viscosos. Agregue 10 g de mantequilla, mezcle bien y deje enfriar. Agrega los aceites de salvia, eucalipto y limón. Vierta la mezcla suavemente sobre los moldes de silicona y déjela hasta que solidifique. Las condiciones de almacenamiento son similares a las de los caramelos de menta.
  3. Dulces con coco. Hervir 100 g de azúcar hasta que se doren. Con una licuadora, bata 100 g de aceite de coco tibio, agregue el azúcar quemada y revuelva. Agrega 1 cucharadita de canela molida y 8 gotas de aceite esencial. Coloca los caramelos en moldes de silicona y refrigera por una hora. Guarde los dulces en recipientes de vidrio en el refrigerador.
  4. Piruletas de jengibre. Vierta media taza de jengibre picado y media taza de limoncillo seco con agua (el agua debe cubrir los ingredientes) y deje hervir. Retirar del fuego y dejar reposar durante 10 minutos. Cuele el caldo, agregue 1 vaso de azúcar y cocine por 20 minutos a fuego lento. No sobrecalentar, a temperaturas superiores a 150 grados, el medicamento perderá sus propiedades curativas. Retirar la mezcla del fuego y colocar en moldes de silicona.
  5. Dulces con aceite esencial. Hervir 400 g de azúcar, 1 cucharada de mantequilla y 100 g de agua y dejar hervir a fuego lento durante unos 20 minutos. Luego retire la mezcla del fuego y enfríe. Puede usar aceite de eucalipto, romero, clavo o canela para hacer estos dulces. Agrega 7-8 gotas de extracto esencial. Engrase un molde de pergamino o silicona con aceite y agregue azúcar. Consume el caramelo después de que se haya endurecido por completo.

Contraindicaciones

Las pastillas para chupar son una forma rápida, conveniente y deliciosa de deshacerse de una tos molesta. Sin embargo, este remedio también tiene contraindicaciones. Los pacientes no pueden ser tratados con caramelos de azúcar:

  • que padece diabetes mellitus;
  • propenso a las alergias;
  • con enfermedades del sistema circulatorio;
  • niños menores de 1 año.
Es importante tener en cuenta que las pastillas para chupar no son una panacea para la tos. Este método es eficaz en terapias complejas. No posponga la visita al médico ante los primeros signos de tos. La automedicación es peligrosa y tiene graves consecuencias.