Dolencias de garganta

Cómo curar rápidamente la faringitis en un niño.

La faringitis es un proceso inflamatorio que afecta los tejidos mucosos y linfoides de la faringe. Esta enfermedad a menudo se diagnostica en la infancia y, por lo general, no representa una amenaza grave para la salud. El tratamiento de la faringitis en niños se basa en una terapia dirigida a fortalecer las funciones protectoras generales y locales del cuerpo, así como a reducir la gravedad de los síntomas acompañantes de la enfermedad. La enfermedad en la infancia ocurre con mayor frecuencia como resultado de hipotermia o bajo la influencia de microorganismos patógenos.

Causas y sintomas

El dolor de garganta puede ser infeccioso y no infeccioso.

  1. Si la enfermedad es de naturaleza infecciosa, la mayoría de las veces ocurre bajo la influencia de virus (influenza, parainfluenza, herpes) o bacterias (estafilococos, neumococos). Las enfermedades de la cavidad bucal, como caries, estomatitis, adenoides, también suelen causar inflamación en los niños.
  2. Las razones no infecciosas incluyen quemaduras y otras lesiones en la membrana mucosa y los tejidos de la nasofaringe, estadía prolongada en una habitación con aire seco o muy contaminado, alergias al polvo, polen y olores fuertes.

Entre los principales síntomas que acompañan a la enfermedad en la infancia, se distinguen los siguientes:

  • ardor, sensación de un objeto extraño en la garganta;
  • hinchazón de la garganta y la parte posterior del paladar;
  • un aumento en los ganglios linfáticos cervicales superiores;
  • rinitis;
  • ronquera, transpiración;
  • aumento de la temperatura corporal;
  • tos seca;
  • fatiga, pérdida de apetito.

La intoxicación del cuerpo con faringitis generalmente no es significativa, por lo tanto, los niños mayores de seis años que se han encontrado previamente con una infección similar toleran la enfermedad con más facilidad que los bebés, para quienes existe una alta probabilidad de complicaciones.

Si la faringitis ocurre en niños y el tratamiento no se inició de manera oportuna, existe el riesgo de complicaciones y la transición de la enfermedad a una etapa crónica, que se caracteriza por los siguientes síntomas:

  • la aparición de una secreción viscosa en la nasofaringe;
  • dolor de garganta constante;
  • la aparición de sequedad periódica y ardor en la nasofaringe;
  • recaídas frecuentes de la enfermedad bajo la influencia de factores adversos.

¡Importante! Si no se trata la faringitis en un niño, pueden surgir complicaciones en forma de bronquitis, otitis media, adenoides y otras enfermedades graves.

Tratamiento

La mayoría de las veces, para un diagnóstico correcto, el pediatra solo necesita realizar un examen y analizar las quejas. Sin embargo, a veces, para confirmar el diagnóstico, para determinar el tipo de microorganismo patógeno que causó la enfermedad, es necesario donar adicionalmente sangre y orina, un hisopo de garganta para cultivo bacteriano. Dependiendo de las causas de la enfermedad, el pediatra elige la forma de tratar la faringitis en los niños.

  1. Si se determina la causa viral de la faringitis, la inflamación se trata con medicamentos antivirales permitidos para niños (medicamentos con interferón, Arbidol, Remantadin, Anaferon).
  2. Si una infección bacteriana se ha unido al proceso de la enfermedad, se debe realizar una terapia adicional de la faringitis con el uso de antibióticos (Sumamed, Augmentin).
  3. Para reducir el dolor en la nasofaringe, use aerosoles antisépticos especiales, tabletas, pastillas (Chlorophyllipt, Miramistin, Ingalipt, Tantum Verde, Lizobakt, Septefril).
  4. Las preparaciones antibacterianas locales en forma de aerosoles (Bioparox, Hexasprey) también son efectivas.

¡Importante! La mayoría de los antisépticos para la garganta en forma de aerosoles están contraindicados antes de los tres años, ya que su uso puede provocar náuseas o un nudo en la garganta.

  1. Si la temperatura aumenta por encima de los 38 grados, entonces es necesario usar medicamentos antipiréticos (paracetamol, ibuprofeno de acuerdo con las dosis de edad).
  2. Beber una cantidad suficiente de líquido le permite hidratar la mucosa nasofaríngea y reducir el nivel de intoxicación. Para hacer esto, use compotas, tés con hierbas medicinales (manzanilla, salvia), bebidas de frutas, agua hervida ordinaria. Es importante que el líquido no esté demasiado caliente, frío, amargo, jugos recién exprimidos (naranja), también se debe excluir el limón.
  3. También se muestra una dieta moderada: debe ofrecerle al niño alimentos blandos y blandos, puré de verduras, sopa picada, caldo. Los alimentos picantes, salados y ahumados están contraindicados. También es necesario excluir las comidas y bebidas frías y calientes.
  4. Observe las condiciones climáticas óptimas en la habitación donde se encuentra el niño. La temperatura del aire no debe exceder los veinte grados, la humedad debe mantenerse al 50-70%. Puede lograr los indicadores deseados ventilando la habitación, limpiando en húmedo con frecuencia, usando un humidificador.

¡Importante! Los expertos no recomiendan usar más de tres medicamentos al mismo tiempo para tratar la garganta.

Un exceso de medicamentos a menudo provoca el desarrollo de disbiosis en la cavidad bucal y un aumento en la cantidad de bacterias peligrosas.

Enjuague

Hacer gárgaras es un medio eficaz para eliminar infecciones en la nasofaringe; este procedimiento también es útil en la terapia compleja de la faringitis. Como soluciones medicinales, puede utilizar:

  • Decocciones de hierbas como manzanilla, salvia, plátano, caléndula, helenio. Para preparar el producto, se vierten veinte gramos de materia seca con un vaso de agua hirviendo, se insiste, se filtra y se usa para enjuagar varias veces al día hasta que los síntomas desaparezcan por completo.
  • La solución salina y bicarbonato de sodio con yodo agregado también es un buen remedio para el dolor de garganta. No es difícil preparar un remedio de este tipo: por un litro de agua potable, tome cinco gramos de sal, refresco y dos gotas de yodo. Todos los componentes se mezclan bien y se lleva a cabo el procedimiento.

¡Importante! Para los niños, es necesario usar medicamentos que contienen yodo con precaución, ya que dichos medicamentos pueden tener un efecto negativo en el funcionamiento de la glándula tiroides.

Al enjuagar, se deben observar las siguientes reglas:

  • puede repetir el procedimiento de seis a siete veces al día;
  • un procedimiento debe durar al menos diez minutos;
  • se utilizan aproximadamente 200 ml de solución a la vez;
  • para un mejor lavado de la garganta con una solución, es necesario echar la cabeza hacia atrás y pronunciar el sonido "y";
  • la solución recogida en la boca debe escupirse por completo;
  • el enjuague intensivo debido a que la solución ingresa al canal auditivo, puede causar el desarrollo de otitis media;
  • el enjuague debe realizarse no antes de sesenta minutos después de una comida, y tampoco comer dentro de los treinta minutos posteriores al procedimiento.

Si el niño no sabe hacer gárgaras o tiene miedo de este procedimiento, los pediatras recomiendan irrigar la garganta con estas soluciones usando una botella de spray o instilando una solución salina en las fosas nasales.

Métodos tradicionales de tratamiento.

Sujeto a las recomendaciones generales: beber una cantidad suficiente de líquido, mantener un nivel óptimo de humedad y temperatura en la habitación, así como con la dieta correcta en el tratamiento de la faringitis no complicada, es suficiente utilizar métodos de medicina tradicional.

  1. El jugo de remolacha se puede utilizar para hacer gárgaras eficaces y como gotas nasales. Para ello, lava la verdura, pélala, ralla y exprime el jugo. Puede almacenar el producto resultante por no más de un día en el refrigerador.
  2. El propóleo es un poderoso antiséptico natural. Esta herramienta se utiliza como desinfectante para diversas enfermedades de los órganos nasofaríngeos.La solución de propóleo se puede utilizar tanto para enjuagar como para irrigar la faringe. A los niños pequeños se les puede ofrecer masticar un trozo de propóleo como golosina o humedecer un trozo de azúcar refinada con una solución.
  3. Los aceites esenciales (eucalipto, árbol del té, abeto, espino amarillo, melocotón) se utilizan para la instilación en la nariz. Estos productos tienen un efecto hidratante de larga duración sobre la mucosa nasofaríngea, lo que le permite evitar la resequedad durante una noche de sueño prolongada.
  4. Un vaso de leche tibia con una cucharadita de miel ayuda a hidratar la garganta mucosa, suavizar la tos seca.
  5. La inhalación sobre vapor tibio con el uso de infusiones de hierbas, aceites esenciales, agua alcalina, tiene un efecto antiséptico, ayuda a hidratar las membranas mucosas y elimina el dolor.

¡Importante! Antes de usar aceites esenciales y productos apícolas para tratar a un niño, asegúrese de que no haya reacciones alérgicas.